Las empresas enfrentan un desafío significativo cuando no cuentan con una visibilidad integral de lo que realmente está ocurriendo en su organización. Esta falta de claridad puede derivar en la creación de estrategias equivocadas y poco eficientes, que no sólo afectan la toma de decisiones, sino también el crecimiento y la competitividad en el mercado.
Existen ciertos síntomas que pueden indicar cuándo una empresa necesita implementar una solución como TAF. Como las siguientes:
/ La ausencia de un equipo dedicado al análisis financiero periódico.
/ Las cifras financieras no muestran la realidad del día a día.
/ El presupuesto no se utiliza como una herramienta de guía.
/ Problemas para identificar áreas de mejora o reducción de costos.
/ Retrasos en la toma de decisiones financieras y desaprovechamiento de oportunidades, entre otros.
La base para lograr solucionar este tipo de barreras es recurrir a la metáfora de “salirse de la caja”, que nos invita a parar y empezar a visualizar que está pasando financieramente en la compañía, esto implica determinar enfoques y establecer una guía clara. La forma más recomendable es implementar este tipo de procesos con equipos externos que nos ayude a tener esa visión integral del negocio desde una perspectiva crítica e imparcial. En la cual, los empresarios pueden reafirmar sus hipótesis y crearse más incógnitas a raíz de información completa y analizada. Es fundamental entender que este proceso se tiene que realizar en conjunto con la compañía, ya que la colaboración interna asegura que los hallazgos y recomendaciones se alineen con la realidad operativa y los objetivos estratégicos de la empresa.
¿Sabes dónde estás y a dónde puedes llegar en tu organización?
Para saber a dónde puedes llegar debemos identificar dónde te encuentras, por lo que realizamos un Diagnóstico que consiste en identificar las oportunidades en tu organización.
/ El análisis del contexto: Etapa en la cual se comienza a conocer la compañía, resolviendo preguntas desde las más simples a las más estructuras, que deberán ser resueltas acompañadas de documentos y bases de datos, obteniendo un conocimiento integral de la compañía.
Importante tener en cuenta que cualquier compañía que quiera implementar esta herramienta y considere que no cuenta con la información necesaria, puede ser un primer paso para comenzar con la construcción de esta, ya que podrás priorizar y conocer que información se debe construir para el desarrollo de un buen análisis
/ Análisis detallado y la identificación de los principales hallazgos: Después de tener un conocimiento previo de la compañía, conjuntamente se comienza a realizar un diagnóstico integral que permite levantar los principales hallazgos que se comienzan a evidenciar por menor rendimiento de la compañía o una menor eficiencia, esfuerzos innecesarios, entre otros. Asimismo, existen casos en donde las compañías ya conocen el daño, pero quieren entender la causa para poder atacarla de una manera más eficiente.
/ Acompañamiento y estructuración de estrategias: En esta fase, se estructura estrategias que pueden impactar a la compañía, ahora bien, es prioritario que una asesoría financiera no se realice por dos semanas y no tenga un acompañamiento estricto de al menos 6 meses, ya que, al no realizarlo, cada análisis y hallazgo encontrado, quedará en un informe que la compañía no podrá utilizar y gestionar eficientemente.
Por otro lado, se deben construir indicadores clave de desempeño (KPIs) que sean tanto específicos como estratégicos y contrastarlos con los estándares y benchmarks del sector al que pertenece la empresa. Esta comparación permite evaluar el posicionamiento de la compañía frente a sus competidores y al resto de la industria. Asimismo, ofrece una visión crítica que facilita la identificación de oportunidades de mejora, así como de fortalezas que se pueden aprovechar para obtener una ventaja competitiva.
Este enfoque no solo agrega valor al proceso de toma de decisiones, sino que también fortalece la capacidad de la empresa para adaptarse a cambios en el mercado y para anticiparse a tendencias emergentes. Al contar con indicadores robustos y una comprensión clara de su posición en el sector, la empresa estará mejor preparada para optimizar su operación, mejorar su eficiencia y consolidar su posición competitiva a largo plazo.
En conclusión, en Grupo Valor creemos que la Torre de Asesoría Financiera es una alternativa que ayuda a tener una mayor visibilidad de la salud financiera actual de la compañía y servirá como base sólida para la toma de decisiones informadas, permitiendo a la dirección abordar de manera proactiva los desafíos y capitalizar las oportunidades antes de que se conviertan en crisis. Sin olvidar que es un proceso conjunto entre la compañía y el tercero para lograr la generación de valor.